viernes, 6 de febrero de 2009

Del absurdo

Manos vacías a la hora de tomar el té. Los huesos ya están dispuestos a ser cortados por la daga de ternura. Sus piernas no pueden evitar ser el portón por donde entran los miedos. Una delicada línea de talco pédico derramado es más blanca, más pura, que sus cánceres pudriéndose en los amaneceres de nostalgia.

Necesito de tu ausencia para sentirte presente, de tu aliento para estacionar la primavera en mis oídos ensordados por el nefasto canto de unas ridículas lagartijas.

1 comentario:

  1. Necesito de tu ausencia para sentirte presente ..

    te adoro, no podés ser más perfecta !

    ResponderEliminar